lunes, 11 de octubre de 2010

Gastón Gaudio - Rafael Nadal. Buenos Aires 2005

Hoy, en una nueva sección de Partidazos, se podrá revivir el extraño encuentro que disputaron el español y el argentino. Uno venía de ganar Roland Garros hacía nueve meses. El otro lo ganaría tres meses después.


Gaudio había vencido en primera ronda a Federico Luzzi en tres sets, mientras que Nadal hizo lo propio ante el argentino Agustín Calleri.

El público estaba muy eufórico. Gastón era el favorito de la gente por ser argentino pero sobre todo por ser el último campeón de Roland Garros. Era un lujo tener a un campeón del Grand Slam parisino en cancha, que ocupaba por ese entonces el octavo lugar del ránking ATP.

Pese a que enfrente tenía un chico de 19 años no muy conocido (todavía), Gastón entró muy errático. No estuvo fino con su derecha y tuvo muchos problemas con su saque. Además Rafa estaba muy firme. Devolvió todo lo que le tiró el Gato en ese primer parcial. Le llegó a decir : "Flaco no podés correr tanto, no podés llegar a todas". Fue un apabullante 6-0. La gente estaba sorprendida.

Gaudio, al igual que en el partido anterior, había entrado muy desconcentrado. Pero distinta fue la historia a partir de ahí. Tomó el control del partido y empezó a meter mas los primeros saques. Le quebró de entrada al mallorquí y en seguida ganó su saque en cero. En el 3-0 estaba 30-40. Pero resolvió muy bien con una derecha cruzada y salvó el break point. Se llevó ese juego y los dos siguientes. Fue el segundo 6-0 del partido. Esta vez para el de Temperley.

En el tercero la historia podía ser muy cerrada. El español había aplastado en el primer set pero el argentino lo hizo en el segundo. Sin embargo se dio la lógica. Gaudio siguió afilado y metió varios winners, sobre todo con su mágico revés. Los aficionados se cansaron de aplaudir desde sus asientos. Se llevó los primeros cuatro games y recién en el quinto Nadal pudo cortar la racha de 10 juegos consecutivos de Gaudio. Nadal sacó 1-5. En el 30-40 Gastón tuvo su primer match point. Y no desperdició la oportunidad. 0-6, 6-0 y 6-1. Un resultado atípico. Aunque viniendo del Gato todo es posible.


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